Tarta de queso o cheesecake
Los griegos, las Olimpiadas, Marcus Procius Cato, Europa, el queso y un señor apellidado Chester. Todo ello está en los orígenes de la New York Cheesecake, esa tarta cuajada de queso que falta en pocas cartas de restaurante más o menos finolis.
La receta de la tarta de queso tiene algunas variaciones, puede hacerse en frío o en caliente, con diferente formulación, pero mantiene la constante de usar queso crema, una base de galletas crujiente y cobertura de mermelada de frutos rojos, fresas generalmente.
La gran mayoría de recetas que me he encontrado a lo largo de mi intenso love story con este pastel llevan harina. Y mira, no, no me convence. En las distintas pruebas que hice para adaptar la receta de la tarta de queso al slow cooker, pude comprobar que si bien la harina daba consistencia a la masa de queso, también la hacía mucho más pesada, de manera que la eliminé para confirmar que no es necesaria (aunque si sois harinófilos convencidos podéis ponerle unos gramillos); que el qu…