Saam de panceta
Un bocado para comer con la manos que viene de Corea para hacer divertidas y sabrosas tus comidas con amigos.
Puedes escuchar el texto completo en este enlace al podcast.
Puede que llevara más de dos años queriendo hacer esta receta de saam de panceta. Lo había probado algunas veces en StreeXo y me gustó mucho. Es una receta –de origen coreano– para comer con las manos, en plan informal, sin remilgos y con servilletas de papel a mano.
Después de un pequeño rifirrafe con el carnicero, que me quería vender una panceta delgadísima y desangelada, alegando que la panceta era así, encontré –al otro lado de la calle– una carnicería en la que la panceta era justo como la buscaba: gruesa y carnosa para que tuviera un buen mordisco.
Este saam no tiene más secreto que escoger una pieza gruesa de panceta fresca y cocinarla hasta que esté melosa y muy tierna. Si se pasa de cocción, el bocado será seco y sin gracia. Por eso hay que vigilar un poco una vez que la cosa ya está calentita dentro del slow cooker y atinar en los tiempos.
Se puede cocinar con antelación, guardarla en el frigorífico, sacarla para atemperarla un tiempo antes y darle el toque de plancha en el último momento.
La lechuga
El propio Dabiz Muñoz recomienda utilizar lechuga iceberg, pero yo he preferido hacer los saam con hojas de cogollo, que son carnosas y de bocado individual. Utiliza las más grandes o dos más pequeñas unidas. Si las pringas con un poco de mayonesa será más difícil que se separen.
Si quieres ser fiel a la receta, usa la iceberg. Tiene muy mala fama pero es una lechuga tersa y con un mordisco crujiente interesante, muy adecuado para este tipo de elaboraciones que son para comer con las manos.
Los mejillones
Hay varias alternativas. Puedes cocinar los mejillones desde el principio, comprarlos ya cocidos o usar una buena conserva de mejillones con salsa picante. En este caso, escoge una conserva que tenga piezas de calibre grande para que el mejillón se vea y se sienta.
La salsa picante
Si usas mejillones en conserva que vienen ya con salsa gallega o picante, puedes evitarte un ingrediente. Pero si tienes una sriracha en casa u otro tipo de salsa picante, como la Valentina, por ejemplo, la puedes añadir a unos mejillones cocidos.
La mayonesa
Te vale cualquiera. Si la haces en casa, ten la precaución de hacerla el momento, con huevos fresquísimos, y desecha lo que no se consuma en el día. Si la quieres enriquecer un poco, prueba a mezclar mayonesa con una cucharadita de mostaza de Dijon o con salsa picante, verás cómo cambia la cosa.
Si eres muy friki de los productos e ingredientes y tienes mayonesa japonesa Kewpie en casa, es un buen momento de sacarla del banquillo y que juegue un partido con la panceta y el mejillón.
Preparación: 20 minutos
Marinado: 12 horas
Cocción: 5 horas
Función: BAJA
Raciones: 4-6
1 bolsa de uso alimentario con cierre de zip
1 pieza de panceta fresca de 750 g entera y con piel
Para la marinada
1 cebolla fresca (poner blanco y verde picado)
3 cortes de jengibre fresco
2 dientes de ajo
100 ml de salsa de soja