Mermelada de cebolla
Las mermeladas no siempre encajan en la hora del desayuno o la merienda, como esta mermelada de cebolla, que es perfecta como acompañante de platos salados. La primera pista nos la da la baja proporción de azúcar, muy por debajo de las canónicas mermeladas dulces reposteras hechas con frutas.
El vino de Oporto –que puedes sustituir por otro similar– y el pochado con aceite de oliva, la llevan del bracete a las comidas principales, donde le gusta lucirse como buena actriz de reparto. Después de un leve preparación previa pochando la cebolla y reduciendo el vino blanco, una cocción lenta y larga convierte las cebollas en una crema estupenda para servir como cama o acompañante de pescados, carnes y aves. Puedes reservarla para esas ocasiones en las que te quieras lucir un poco, fiestas y celebraciones, Navidad y otras fechas señaladas.
Con una buena carne asada o a la plancha, un plato de pescado al horno, o incluso como base o remate de canapés y aperitivos. Es recomendable usar cebol…