Hace un par de años, en un viaje a París, comí boeuf bourguignon en Josephine Chez Dumonet. Era la hora de la cena y normalmente ceno muy muy ligero, pero había boeuf bourguignon en la carta y soufflé de postre, ¿cómo dejar pasar una oportunidad así? Mientras me trabajaba el cucharón y la cocotte, pensaba en que era una receta ideal para hacerla en crock pot: vino, carne melosa y chup chup suave. La cena fue un disfrute y no recuerdo si me resulto pesada, pero todo fue al buche, regado con su vino de rigor, y aún hubo sitio para comer el soufflé con dignidad y placer.
Este receta no admite #topadentro –el hashtag que ha inventado la comunidad crockpotera de Facebook para las recetas que no llevan preparación previa–, porque es esencial reducir el vino, hacer un roux y dorar la carne para obtener el sabor y la textura perfectos.
No te voy a engañar, es un receta laboriosa que te llevará un extra de trabajo, pero que te compensará cuando empieces a sentir el aroma de la carne y el vino …